Trabajo desde casa y no quiero moverme por una cuestión de comodidad. Voy a la cafetería de la esquina. No quiero gastar en un alquiler que no necesito. Esas son, generalmente, las excusas por las que la gente se pregunta si conviene trabajar en un coworking.
Si sos un nuevo emprendedor o Freelancer seguramente te habrás preguntado por que ir a un espacio de oficinas compartidas cuando podes trabajar desde tu casa. ¿Por qué cambiar tu rutina con algo que no necesitas?
Trabajar desde casa puede parecer un sueño cumplido al principio. Te levantas a cualquier hora, manejas tus propios horarios sin que nadie te diga que hacer. Tu oficina es tu notebook mientras estás tirado en la cama.
Pero al poco tiempo te vas a dar cuenta que no es un ambiente laboral. Tendemos a distraernos, ser cada vez más vagos, no sentirte con ganas de levantarte temprano, dejar todo para último momento. El ocio va a pasar a ser el socio que te arruine el negocio. Y esto va a influir en la disminución de tu productividad.
¿Y si voy a un bar? El ambiente claramente no es el de un espacio de trabajo. Una cafetería es un espacio para pasar el rato, no para estar todo el día en una jornada laboral.
Entonces, ¿Mi emprendimiento requiere de un ambiente profesional y social?
Si vas a recibir clientes constantemente, juntarte con socios, empleados, organizar un evento, reuniones o videoconferencias, no creo que quieras hacerlo en el patio de tu casa…
En Bambú contamos con espacios compartidos para trabajar en conjunto con otros freelancers en un ambiente cooperativo, y también salas privadas y áreas comunes como el quincho, para recibir clientes, teniendo tu propia dirección comercial, en un espacio apropiado para diversos rubros.
Otros beneficios de trabajar en un coworking es que estamos cerca de la estación, del banco, del centro de Banfield, por lo que tenes todo cerca. No tenes que andar moviéndote de un lado a otro. Compartir oficina es ideal para quienes manejan su negocio vía notebook, dónde los rubros más solicitados son arquitectura, diseño, desarrolladores, programadores, contadores y abogados.
Sí te gustó este artículo, podes compartirlo.
Escrito por Hernán Douzon, un novato de la escritura en blogs.